Las Livery Companies (Compañías de librea, haciendo referencia al traje ceremonial característico de cada una de ellas) son unas asociaciones de comerciantes o artesanos (actualmente también de profesionales) que se originaron en la edad media. Aunque el concepto de Livery company se remonta al siglo XIV, en la actualidad se siguen constituyendo algunas nuevas.
En un principio, estas asociaciones gremiales se dedicaban a mantener controlado su área de producción o comercio con el aval de la monarquía, que les garantizaba el monopolio. Ese control se extendía a mantener un número máximo de miembros, formar a los nuevos, controlar los salarios, fijar precios de compra y venta, etc. Con el tiempo llegaron a ser además una especie de mutuas que ayudaban a sus asociados y sus familias en momentos de necesidad. Cómo no, también tenían lazos con la Iglesia (primero con Roma, y tras Enrique VIII con la Iglesia anglicana): mantenían el culto a sus santos patronos y sostenían económicamente capillas e iglesias.
Curiosidad: La Worshipful Company of Goldsmiths (gremio de comerciantes de oro) controló durante siglos todo el mercado de metales preciosos. Ellos eran los que certificaban la pureza de los lingotes de oro con su sello, el Hallmark, que ha dado nombre a cualquier sello de certificación.
Las liveries llegaron a tener un gran poder económico y, por extensión, político. Mucho de ese poder lo mantienen hoy en día: Sus socios de mayor rango, los liverymen, eligen (en una pseudodemocracia*) de entre sus miembros a los que gobiernan instituciones tan importantes como la City of London Corporation (híbrido entre gobierno autónomo y empresa privada).
Estas compañías perdieron su razón de ser cuando el comercio y la producción de bienes se liberalizaron y se fueron convirtiendo en asociaciones benéficas y educativas, aunque algunas aún mantienen lazos con sus profesiones de origen.
Curiosidad: La última livery company en ser reconocida ha sido la Worshipful Company of Art Scholars (algo así como Excelentísima compañía de eruditos en arte) en 2014.
En 1516, el Lord Mayor decide dar un orden de precedencia a las 48 compañías existentes según su poder e importancia. Las 12 primeras son las conocidas como las Twelve Great Livery Companies y son:
- The Mercer's Company (Comerciantes en general)
- The Grocer's Company (Especias)
- The Draper's Company (Comerciantes de lana y tejidos)
- The Fismonger's Company (Pesca)
- The Goldsmith's Company (Metales preciosos y joyas)
- ** The Merchant Taylor's Company (Sastres)
- ** The Skinner's Company (Peleteros)
- The Haberdasher's Company (Merceros)
- The Salter's Company (Sal)
- The Ironmonger's Company (Herreros)
- The Vintner's Company (Comerciantes de vino)
- The Clothworker's Company (Pulidores de tejidos)
Con las sedes de las Twelve Great Livery Companies hemos hecho una pequeña ruta. Son aproximadamente 5 km y pasa por muchos de los lugares de interés de la City. Es preferible hacerla en fin de semana o festivo, que es cuando la City está vacía y se puede andar cómodamente. Pueden encontrar esta ruta en el segundo mapa.
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Además, el derecho a voto para la elección de, por ejemplo, el Lord Mayor, no sólo lo tienen las personas físicas sino también las empresas en función a su número de empleados. En realidad, las empresas tienen el doble de votos que las personas físicas y esto hace que, en la práctica, las grandes compañías financieras sean en la actualidad las que controlan el poder de la City y las que hacen que sea una zona ciega para la legislación británica, especialmente en lo que se refiere a leyes económicas y fiscales.
Pido perdón por el rollo, pero explicar el funcionamiento de unas instituciones de tiempos de los normandos que siguen existiendo no es nada sencillo.
** Estas dos compañías se alternan en el orden de precedencia cada año, como solución a la disputa histórica entre ellas acerca de cual ocupaba el sexto lugar de la lista.
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