Más arquitectura londinense.
Renzo Piano es un arquitecto e ingeniero italiano. A principios de la década de 1970 saltó a la fama mundial por la construcción junto con Richard Rogers del controvertido Centre Pompidou en París.
Aunque es un arquitecto internacional, en Londres sólo encontramos dos de sus obras (y una más en proyecto que no acaba de materializarse), eso sí, las dos espectaculares.
En primer lugar trataremos acerca de la más conocida: The Shard.
The Shard (la esquirla), inaugurado en 2012, con sus 95 pisos y 310 metros de altura es el edificio más alto de Londres y, desde su finalización hasta principios de 2017, fue también el más alto de Europa. En la actualidad sigue siendo el edificio más alto de la Unión Europea, aunque ya sabemos que tiene los días contados. Está construido sobre la estación de London Bridge, dentro de los planes que elaboró la alcaldía de Londres para el desarrollo de viviendas cerca de los principales nudos de transporte.
Curiosidad: durante la construcción del Shard, en febrero de 2011, los obreros encontraron un zorro en la planta 72. Lo capturaron, le pusieron de nombre Romeo y posteriormente fue liberado en Berdmonsey. En la actualidad es uno de los símbolos del edificio.
El diseño del Shard, según Renzo Piano, evoca un campanario (los campanarios fueron durante muchos siglos las únicas construcciones que sobresalían en altura en las ciudades) pero también las velas de un barco (Londres, ciudad portuaria, ha tenido muchas en el Támesis hasta hace relativamente poco tiempo).
El edificio aloja un hotel, zona de oficinas y varios restaurantes y pubs desde los que se pueden contemplar unas espléndidas vistas de Londres, así como viviendas privadas en los pisos comprendidos desde el 53 al 65.
Curiosidad: el Shard dispone de un sistema de iluminación en sus plantas más altas que es utilizado en ocasiones especiales con resultados espectaculares.
La otra obra de Renzo Piano en Londres es Central Saint Giles.
Central Saint Giles se encuentra en el extremo este de Oxford Street y se terminó de construir en 2010. Consta de dos edificios separados por una explanada central. Uno de ellos de 15 plantas que contiene 109 apartamentos (56 de ellos de lujo), y otro de 11 plantas que aloja oficinas. Las plantas bajas son todas de espacio comercial.
La construcción cuenta con una llamativa fachada de cerámica en colores vivos, amarillo, naranja y verde lima que, en consonancia con la filosofía de bajo mantenimiento del edificio, son autolimpiables aprovechando la lluvia.
Con esta obra, según sus palabras, Renzo Piano buscaba romper la monotonía de la ciudad, traer corazón a una parte olvidada del centro de Londres y marcar la máxima diferencia posible con el edificio al que reemplazó, una mole de 15 plantas que albergaba oficinas del ministerio de defensa y que describió como "una especie de fortaleza".
Curiosidad: La zona en la que hoy se encuentra Central Saint Giles ha sido tradicionalmente una de las más corrompidas de Londres. A mediados del siglo XVIII había una taberna cada 4 edificios y en la década de 1970 todavía había bares clandestinos.
Como todas las construcciones innovadoras en Londres, Central Saint Giles también tuvo su polémica. Los vistosos colores de sus fachadas en una zona que antes era eminentemente gris no han sido del agrado de todos. Se le ha llegado a comparar con el Marmite*, que o te encanta o lo odias, pero no te deja indiferente.
Pueden encontrar 46 fotos más de The Shard y Central St. Giles en la cuenta de Google de Londres Avanzado.
Relacionado:
* Marmite es una pasta hecha con extracto de levadura que se toma untada en las tostadas o galletas.
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