Harry Beck

Harry Beck fue el creador en 1931 del mapa esquemático del metro de Londres. Marcó un estilo que desde entonces ha sido adoptado por la inmensa mayoría de mapas de rutas de transporte del mundo.


Mapa actual del Underground. Ya va haciendo falta otro Beck que lo simplifique

 

Hasta 1931 los mapas del metro eran geográficamente precisos. Sobre un mapa de Londres se marcaban las estaciones y se unían con líneas que seguían las trayectorias de los túneles. Hemos leído una definición que nos ha parecido muy descriptiva: era como lo que vería un pájaro con visión de rayos X sobrevolando la ciudad. Como pueden imaginar, era bastante confuso. El centro de la ciudad, donde había mas estaciones, aparecía abarrotado mientras la periferia estaba prácticamente vacía. Otra descripción bastante acertada que hemos encontrado, lo define como un plato de espagueti.


Mapa del metro de Londres de 1908. Dominio público


Henry Beck trabajaba como delineante en el metro de Londres, haciendo dibujos técnicos de circuitos eléctricos. En su tiempo libre y aplicando los principios del diseño de esos circuitos, simplificó el mapa del metro descartando la exactitud geográfica y destacando la situación de cada estación con respecto a las adyacentes.

Cuando lo presentó a los directivos de la compañía no fue acogido con entusiasmo. En un principio fue rechazado al ser considerado demasiado radical, pero tras insistir Beck, se decidió hacer una prueba y se lanzó una pequeña tirada de 500 ejemplares que fueron muy bien recibidos por el público. A partir de ahí se hizo oficial y la siguiente tirada fue de 700.000 ejemplares.


Piet Mondrian. Composition with yellow, blue and red. © Tate, usado bajo licencia Creative Commons CC-BY-NC-ND (3.0 Unported)


A pesar de ser un diseño de utilidad demostrada y de gran impacto visual, Harry Beck sólo recibió el equivalente a 5.000 libras por su trabajo. Con posterioridad fue contratado para actualizar y mejorar el mapa, pero perdió el control creativo y llevó al metro de Londres a los tribunales para intentar recuperarlo. Finalmente renunció a sus derechos cuando su esposa sufrió una crisis nerviosa.

Su trabajo fue finalmente reconocido en la década de 1990 cuando el museo del transporte le dedica una galería. Fue un poco tarde, porque Beck había fallecido en 1972.

La imagen del cuadro de Mondrian viene a cuento por la semejanza con los planos del metro de Harry Beck, suponemos que ya se habrían vds dado cuenta.



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